Cuando hoy he llegado al portal me he dado cuenta de que había pasado de largo por delante de la panadería sin comprar el pan, y me ha dado mucho coraje, habida cuenta de que la panadería, aunque cerca, está antes de subir la empinada cuesta que lleva a mi casa.
Y pasé de largo porque mi mente no me acompañaba en el recorrido diario, sino que estaba, a mi pesar, centrada en hallar explicación a comportamientos, cuando menos extraños, de seres que se cruzan en nuestro camino.
Un año antes de abrir este blog ya tenía uno en el que sólo colgaba, muy de tarde en tarde, alguna que otra ¿poesía?. Una tarde que navegaba sin mucho rumbo encontré un blog con poesía y pequeños relatos, amén de recortes de prensa en los que había salido infinidad de veces el autor, que me gustó mucho. Casualidades hailas, y pese a no ser gallego vivía aquí, en Redondela. Le dejé un breve comentario que, seis meses después, me devolvió en mi blog alabando mis escritos y haciendo alguna pregunta directa. Me hizo gracia jugar al gato y al ratón y los mails derivaron en un divertido juego del escondite. Yo le conocía a él, pero él no me conocía a mí. Tiempo después me convenció para tomar un café, y dado que yo le veía por la calle a menudo me pareció correcto dar la cara. Tomamos café, charlamos un buen rato y nos despedimos.
Lo que mi mente no comprende es por qué ahora unas veces me saluda y otras no. Hoy hemos coincidido bajo un andamio de esos que ponen para arreglar las fachadas de los edificios, incluso nuestros brazos se han rozado y ha mirado al frente fingiendo que no me ha visto. Y así desde aquel café. Al principio yo le saludaba aunque se hiciera el loco, por aquello de que no se me achaque a mí la mala educación. Pero me he cansado de dar la impresión de que mendigo su saludo. Me importa el tipo un bledo. Si él dedujo de mis mails una inteligencia y una cultura que luego no resultaron reales es su problema. Pero no me cuadra que hace unos meses me enviara un mail de estos colectivos solicitando colaboraciones de cara a una publicación que estaba ultimando y que no me diga simplemente hola por la calle. Supongo que en tres años aun no ha tenido tiempo de borrar mi dirección de su mail.
No sé si lee este blog, creo que no, pero por si acaso desde aquí le digo, que no sufra, que un hola por la calle no contagia la incultura ni obliga a nada, y que su aspecto de poeta culto e interesante no se verá en absoluto afectado por abrir momentáneamente la boca al cruzarse con una ama de casa vulgar y regordeta, y encima aleja de uno la fama de maleducado.
Ainsss, tengo que bajar a por el pan.
Joe Vitru, qué pedazo de post! Eres una tia como la copa de un pino, eh?
Hay gente así,no le des más vueltas. Personalmente creo que yerras buscando en ti la causa de esto. Evidentemente el problema está en él y no en ti. No se, al menos por lo que has contado.
No te acuerdas que conté yo hace poco que la chica esa, la vecina que me salvó la vida de morir congelada en mi terraza tampoco me saluda? Gira la cabeza cada vez que nos cruzamos, que es muy a menudo.
Hay gente por ahí muy triste y sobre todo muy cobarde. Alégrate de no ser así y de tener esa fuerza y ese arrojo y esa alegría y que le den por culo al Sr. culto.
Un besote
Estoy com Wen, suscribo todas sus palabras, además, yo viví hasta hace poco en el barrio Madrileño de Arguelles, uno de sus ilustres vecinos es el escritor Álbaro pombo, Don Álbaro pasea casi todos los días por la calle, y es saludado por infinidad de personas, él en ocasiones no sabe ni quién le saluda, y si su «increible» despiste no se lo impide siempre responde al saludo. Álbaro pombo es premio nacional de literatura, ha ganado el planeta, es academico de la lengua y no se cuantas cosas mas.
Pues yo también creo que Wen lo ha expuesto muy claro y muy bien.
Así que poco más voy a añadir.
Sólo insistiré en que no te culpabilices ni te restes méritos ni virtudes. Sea lo que sea lo que piense ese tipejo es problema suyo, no tuyo.
Además, no sé si él será muy culto o no, pero maleducado lo es un rato largo.
Asín que… ¡a cascarla!
😛
Bicos (y no te olvides del pan)
¡Gentuza! No sabe lo que se pierde, el poetastro.
No entiendo ese comportamiento de la gente, que es más habitual de lo que podamos pensar. ¿Sabes que te digo? Que le vayan dando por donde escuecen los pepinos porque un tipo así no se merece ni un hola tuyo, que vales mil veces más que él. Ale, un beso
Vaya putada, lo del pan hija, no lo del cultillo ese de tres cuartos…
Yo siempre saludo, por lo mismo que tu dices, y porque chica, los holas a mi me salen gratis! jajajajjajajajajjajaja
Y lo que dice estil… él se lo pierde 🙂
Besicos
Que más decir… No saber modales también es ser un inculto. La gente que desprecia merece ser despreciada… Y si quiere estar entre personas de su nivel quizá tenga que arrastrarse por el suelo.
Él se lo pierde él se lo pierde él se lo pierdeee……
Porqué nos encontramos gente así, que niega un saludo..? quépenapordiós!
Nada más que decir a este respecto…
Por otro lado tengo que decirte que la Lessing me puede, me quedé en la página 63 y ni ganas tengo de cogerlo… Me ha vencido, así que no podré comentar, sniff.
Un beso!
Mierda! hoy tengo lentejas para comer y no he comprado pan…! y las panaderías ya están cerradas,… joer.
Lo más probable es que esperara que te postraras boquiabierta ante su vasta cultura y que cayeras rendida a sus pies, con las bragas en la mano, pidiendo un hijo suyo.
¡Qué lástima que seas una persona normal! XD
Esto de ser el undécimo me libra de hacer un comentario sesudo.
Yo a ese tipo le diría algo así como «la kultura me satura», evidentemente SU cultura.
Y tú, estate más atenta al pan, mujerpordios, que he tenido que mojar los huevos fritos con una cacho de churrusco duro. Ains…
Ainsss, Mariano, no te imaginas lo que jode tener que bajar de nuevo la cuesta a por el puñetero pan. Bueno, miento, lo que jode es tener que subirla de nuevo.
John, es una lástima, sí, ¡qué se le va a hacer! jajajajajaja.
Lola, tranquila, creo que todos coincidimos en nuestro repelús a ese libro de la Lessing. Y las lentejas sin pan son pecado, no sé como no lo han puesto en la lista esa nueva que han editado, jajajajaja.
Iván, ¡cuánta razón tienes!, gracias, un beso.
Belén, deberíamos darle un diccionario para que vea la definición de saludo, tal vez se llevara una sorpresa, porque creo que tiene el hombre un pequeño problemilla.
Paco, tienes razón, es más habitual de lo que parece. Al menos a mi no es la primera vez que me ocurre. Debo tener algo que yo no veo, jajajaja. Gracias, besos.
Estil, ¡cuánto saber encierran tus palabras!. Gracias, besos.
Irre, no te preocupes, algo así no me resta seguridad. Pero el post ha sido como confirmar públicamente que no le pienso saludar más. ¡¡¡Por orden de la señá Vitruvia se hace saber……!!!
Joako, comparar a un don nadie con Don Álvaro Pombo es como comparar un palito de cangrejo con un centollo. A este no le saluda nadie, quiero decir, yo le saludaba por ser una persona con la que compartí mesa, café y conversación, ni más ni menos. Un beso.
Wen tienes razón, ya ni me acordaba de ese post. Pues sí, es exactaente así. Osea, conoces a alguien, luego le saludas y hace que no te ve. Incomprensible.
Sois unos soletes, gracias. 🙂
Mira prima, no le des más vueltas ni busques en ti, problemas que tiene él. Y sólo él.
Jovekovic me ha quitado las palabras de la boca, o las teclas de los dedos, vamos, como quieras.
Tú no te comas demasiado el coco intentando comprender a gente a la que apenas conoces y quédate con lo positivo: gracias a él has escrito una entrada genial.
Cuéntanos un poco más la próxima vez que te cruces con él!
Un gil… tal cual. Eso es el tipejo ese, por muy poeta que sea y muy culo (perdón, culto) que se crea. Lo que es él es un maleducado y un engreído. No descarto la idea apuntada por mi colega John… gustaría de haber encontrado una esclava sexual, pero va a ser que no.
… y ese paaaaaan… que tengo «un gos que no me ladra» (o algo así).
Biquiños 😉
Se puede llegar a ser muy ignorante cuando no se ve más allá de tu círculo «»vital»»…pero que más da, la vida disen que son dos días xD
Saludos y besossss
Jove, con primos como tú da gusto, gracias.
Rodros, sé bienvenido. Gracias, no le daré más vueltas, el post era como una minicatarsis.
Banderas, hoy ha sido lo primero que he comprado, por si me cruzaba con él de nuevo, jajajajajaja. Biquiños.
Teeseese, bienvenido, tienes razón la vida es corta para perder ni siquiera un segundo más en gente así.
Gracias chicos.
Qué maleducado! Odio a esos que van de intelectuales que no se relacionan con los que consideran «inferiores»…
Dale la vuelta a la tortilla, Vitru, porque para mí que es lo contrario: el tipejo pseudosedudo y pseudopoeta no te alcanzó, y le pueden la soberbia y el orgullo. Que a ti se te puede olvidar comprar el pan, pero no se te olvida (porque viene de fábrica) cómo ser una mujer de pies a cabeza, una «escribidora» por demás interesante y una joyita que cultivar. Pero NO que poseer. ¡Cuántos tristes plumas flojas hay que necesitan conquistar lo que les viene grande!
Se llama envidia y lo peor -para él- es que, aun pagado de sí mismo, sabe que sólo le adoran quienes no tienen otra capacidad.
Nena, es él el avergonzado (y frustrado, y vencido) porque no te llega ni a la suela de los zapatos que suben y bajan cuestas a por el pan de los suyos.
Pero yo que tú seguiría saludando. ¡Vamos! ¡Ni que te afectara más o menos!